periodismo-comunidad-voz pública

Cuando adolescente Nelson Lista, director de Periscopio, se paró frente al ómnibus que por tercera vez pretendía no pararle. La máquina frenó y las heridas no lo mataron.

Hace 10 años, en pleno auge de lo global, decidió apostar por lo local, se sumó a la tendencia de los periódicos barriales y fundó Periscopio.

Sus páginas retratan y construyen el primer archivo de la comunidad más cercana. Lo local no es la nota de color, es el foco; de esta manera los vecinos son a la vez protagonistas y lectores. Disfrutan y viven lo publicado, forman parte del espacio que el medio genera.

Acá una clave del diseño: crear espacios con sentido. Mientras los expertos anunciaban el fin de los territorios y los espacios públicos, el proyecto editorial sorteó las modas de formas y contraformas, pisó fuerte en los contenidos y publicó el territorio.

Opera desde la periferia, pero no desde el margen. Escribe sin vergüenza acerca de los temas más duros de la política nacional e internacional y promueve la actividad cultural (el 16 de diciembre se inaugura la Esquina Periscopio con los ganadores de su tercer concurso de Pintura y Poesía), el barrio es parte del mundo y no lo autoexcluye.

Transforma los obstáculos en medios. Un volumen de avisos envidiable alientan el comercio zonal y le sirven de soporte para continuar fortaleciendo los bienes simbólicos de su comunidad.

La suerte me llevó a ser su amigo pues a los tercos o los quieres o lo evitas, nunca los enfrentas, los tercos no concilian. Si no pregúntenle al chofer del ómnibus.

nodiseño-falta de política periodística

La clave está en el disfraz y no en la copia.
El disparte del nuevo nodiseño de Últimas
Noticias no es que intente una mala copia del diseño de Clarín, es que no es un diseño. El diseño debe mantener una relación honesta con el producto, debe contemplar sus necesidades, potenciar sus virtudes y en el caso de una publicación debe ser coherente con su política periodística.
Últimas Noticias pretende vestirse con el diseño de un diario con otras características y que se dirige a otros lectores.

Para muestra basta un botón, Clarín agrega el correo electrónico que quién firma las notas principales. De esta manera el lector tiene la oportunidad de dirigirse directamente al periodista, corregirlo, increparlo, felicitarlo. Le da la opción de una respuesta automática y personalizada que sortearía el bolsón de las cartas al director. Invita al lector a formar parte de la redacción.

Últimas Noticias copia la pieza pero no siempre pone el correo del periodista, la mayoría de las veces pone el correo de la sección (llega a poner el correo de la sección en notas de agencias, ¿a quién dirigirnos? ¿a ANSA? ¿a Mundo?).

La pieza despersonalizada equivale a un bolsón más pequeño que ya tenía en otras páginas. Genera un espacio sin sentido o sentido limitado.

Parece que Últimas Noticias necesita disfrazarse, simular ser otro, es un error si nos molestamos ante tanta sinceridad.

así trabajan los diarios

El editor de Al Toque, suplemento deportivo de El Observador, trajo media docena de diarios australianos para archivar el honor de ser la primera selección eliminada de la clasificación a la fase final de un mundial por penales.Entre el material nos recomendó esta doble central sábana y se manifestó fascinado por la foto superior.

Uno de los editores de fotografía explicó que la foto la toman desde una cámara con un gran angular, montada en un mini trípode a nivel de cancha y manejada desde un control remoto por radiofrecuencia. De esta manera pueden tomar fotos desde un sitio privilegiado sin interferir la la publicidad estática (cosa prohibida). El mismo fotógrafo se coloca en la esquina del córner con otra cámara. Los disparadores de ambas cámaras están sincronizados, o sea, con un mismo disparo se logran dos tomas desde diferentes sitios de la escena elegida.

El resultado es una buena foto, con casi toda la información posible (pelota en el arco, golero uruguayo derrotado, australiano festejando y todo el público), defendida por una buena puesta en página. La base de la foto equivale al 90% de la doble central, la misma foto a dos columnas valdría muy poco pues perdería lo espectacular (así la definió el editor de deportes).

No vamos al mundial pero constatamos la preocupación de nuestros colegas periodistas, en este caso Luis Inzaurralde, por el impacto fotográfico y las formas de trabajo de otras redacciones.

Cámaras detrás del arco durante la final de la Copa 2002, Kyodo (AP)

fotografía-ética-sujeto

Desde el lunes 7 de noviembre, el diario El Observador
de Montevideo, incluye el nombre del fotógrafo en los créditos
de las fotos de agencia. Nos enteraremos quien pensó
la foto además de que empresa las distribuye y administra. Una
batalla ganada para el sujeto.

infografía-mala-periodismo-corrección

Me avisan hoy, 10/11/05 que el editor de Bocabierta me dio la captura, encontró deficiencias en una infografía realizada por mí para El Observador.

Si bien el dato periodístico no es incorrecto, si lo es la puesta en página del mismo. El dato crudo, fuera de contexto o mal presentado, no es información, no le damos forma al conocimiento.
El resultado fue una pieza deshonesta con su tipología. Nos referimos aquí a tipología como formato o soporte nominado y reconocible por quien mira o lee. En este caso la tipología es la infografía, los lectores y el editor de Bocabierta reconocen una infografía y saben que esperar de ella (las tipologías generan expectativas): claridad, síntesis gráfica y rigor. En la parte fundamental de esta pieza no las encuentra y las reclama. Tiene razón y nos aporta una solución más correcta. Disculpas a los lectores y gracias al azote de Bocabierta. Debemos estar atentos, afuera hay gente que piensa y actúa.

diseño de la información-estudio-lector

El público es un examinador, pero un examinador distraído. Walter Benjamin, La
obra de arte en la época de su reproductibilidad técnica.

Hago pie en este concepto de Benjamin para poder prefigurar el lector para el cual pretendo trabajar.

Tenemos delante un lector experto. Experto en los temas que le interesan y en los que le afectan en forma directa. Experto también en diseño en cuanto reconoce lo diseñado, vive en un ambiente donde el diseño es rasgo compositivo de objetos, espacios, información y conductas.

Este mismo lector se distrae y escapa entre el vértigo en el cual discursos y actores dicen y contradicen en constante mutación, abrumado por la saturación informativa (tanto de noticias, señales o publicidad) y huérfano, muchas veces, de información histórica.

Abordamos a este lector desde el lugar con mayores posiblidades para recolectar y generar los datos para la información, la redacción de un diario.El diseño de la información transforma estos datos (lo "crudo" como coinciden Baruch y Marc MacKay en la entrevista-debate en duopixel) en acontecimientos públicos. La puesta de la información en página (ya sea foto, ilustración, infografía o toda la página) guía la interpretación de la misma. En nuestra capacidad de maniobra está el poder satisfacer las espectativas del experto, mientras para el distraído clarificamos los discursos, jerarquizamos la masa informativa y lo acompañamos en el aquí y ahora.

La carrera de diseño de la información debe darnos los elementos para mejorar nuestra capacidad de maniobra y así cubrir la necesidad de potenciar uno de los campos más influyentes en lo público dentro del diseño editorial, el diseño de prensa. Por encima de los diarios o los profesionales, el prinicipal beneficiado será el lector.

La coordinación de la carrera (en Uruguay deberíamos generar espacios similares) por Baruch, un diseñador-periodista, alienta a esperar que ésta profundice el género discursivo dentro del diseño. Que logre generar lenguajes comunes entre periodistas y diseñadores para que ambos dejen de pugnar por espacios dentro de la página y entiendan de una vez que texto e imagen son diástole y sístole que bombean la sangre informativa dentro del periódico y que la falla de uno conduce siempre al paro cardíaco.

mal periodismo-fotografía-pésima edición

En las páginas 12 y 13 de la edición del viernes 4 de noviembre de 2005 de La República nota y aviso aparecen ilustrados casi por la misma foto.

Queda en evidencia un trabajo desde la desidia y la precariedad: tener 10 minutos para lograr la fotografía, sacar una donde aparezcan todos los protagonistas, la foto de familia. No es una cobertura periodística, la foto no informa, no se transforma el dato en acontecimiento más allá del aviso oficial, hasta los pie de foto tienen puntos en común. La foto se repite en la tapa sumando tres las veces que la misma foto nos avisa del acontecimiento.

Este diario no acredita las fotos a los fotógrafos y no podemos enterarnos quien nos habla desde la cámara. ¿No son sujetos los fotógrafos?